El objetivo prioritario e indiscutible hoy y la preocupación profunda de los científicos, es la urgencia inmediata de la reducción de la emisión de los gases de efecto invernadero (GEI) para no pasar los 2oC de aumento de temperatura global del planeta en el 2050. Las emisiones globales de CO2 están continuamente incrementándose, prediciendo los especialistas efectos catastróficos debidos al cambio climático. Todos estos fenómenos ya están en marcha. El diseño de políticas debe considerarse con mucho cuidado para incentivar las opciones de tecnologías de bajo-carbón. Un componente clave en el mundo es la energía nuclear dentro de los sistemas de generación eléctrica. La energía nuclear es segura, sustentable, económicamente viable y durante la operación de las centrales nucleares no se emiten GEI. Estudios importantes demostraron que la energía nuclear debe ser una parte fundamental de la solución para cumplir con la demanda creciente de electricidad mientras se reducen los GEI. Las energías renovables son también de bajo-carbono pero son energías intermitentes, con el problema del rápido ajuste a la grilla, lo cual requiere del acople a instalaciones de almacenamiento de energía, no disponibles actualmente, o plantas “backup” térmicas a gas las cuales emiten CO2 y están asociadas con emisiones de metano a la atmósfera. Está en desarrollo un “sistema híbrido” en Estados Unidos de características interesantes. Es necesario que durante el uso de combustible fósil se efectúe la captura de CO2, su transporte y disposición final. Se han desarrollado tecnologías, algunas ya en aplicación.
CAMBIO CLIMATICO ENERGIA NUCLEAR FUENTES DE ENERGIA